Reflexiones de un@ cuarenton@

Nuria, madre de primaria e infantil 

En primer lugar, animaros a que os apuntéis a una nueva sección. La idea se me ocurrió de repente, mientras comía.  El motivo es que siempre me ha gustado escribir y ahora tengo espacios libres que puedo dedicar a esto y lo más importante: me apetece. Las “ reflexiones ” son propias, pero resulta sorprendente que expresadas puedan ser compartidas por otros, o ayuden a reflexionar y sino, no pasa nada. Para empezar diré que sufrí  un cambio vital o personal. Me pregunto si tendrá que ver con los 40.

Llegando a la mitad de la vida empiezas a cuestionártela, si es lo que quieres, si eres feliz, si te falta algo,….

En este punto de no retorno, no hay vuelta  atrás. Valoras y decides. Cuando las respuestas a estas preguntas no te gustan, entonces comienza ese cambio, lo que no te gusta, lo que no quieres, lo que no te hace feliz. Hay que cambiar todo. Todavía queda media vida.¡ Ánimo y paciencia!. Este proceso es duro y laborioso y a veces hasta desesperante. Cambiar la seguridad de tu vida por no sabes qué. Hay que estar un poco loco, pensaran muchos, o no sentirte bien contigo mismo. Si la decisión está tomada, sigue adelante, llegan nuevas etapas, nuevos momentos, experiencias y también vacios.  Crear, reinventar tu vida no es fácil, pero es tuya, es sobre lo único que puedes actuar y decidir libremente. Para llegar hasta aquí, en busca de la propia esencia hay que ser valiente  y un tanto inconformista y rebelde. Porque es cierto que con el tiempo, la esencia de lo que somos se va perdiendo, tapando con otras capas.  Hasta que un día te miras al espejo y no te reconoces. ¿Quién eres? ¿Cómo eres?.

Ni lo sabes.  Hay que desandar el camino para llegar a uno mismo. Fijaros en los niños pequeños, cómo disfrutan de la vida, se la comen a bocados. Eso lo hemos perdido. La capacidad de disfrutar de las cosas más sencillas. Aprendamos de ellos, porque lo necesitamos. Incluso los niños un poco más mayores la pierden. No saben disfrutar. Vamos a reflexionar sobre esto: “disfrutar”, “ aprender a disfrutar” lo que tenemos, lo que hacemos, lo que compartimos, todo lo que podamos. ”Disfrutemos como niños”.