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Rodrigo Romeral
Echo la vista atrás y recuerdo mi primera bicicleta (no heredada de mi hermana). Una de carretera tamaño infantil. Los Reyes Magos se habían portado bien esas Navidades. ¿O era yo el que tenía que haberme portado bien durante todo el año? ¡Daba igual! Tenía aquella joya y me moría de ganas de salir a la calle para enseñársela a toda la pandilla. Y pedalear y pedalear…
Unos cuantos años y muchos Kilómetros después, monto a
“Rayito", mi bici verde de ciudad. De vez en
cuando viajo a través del tiempo. Os diré un truco a los mayores, si movéis los
pedales hacia atrás, volvéis a la infancia. ¿Os acordáis? Os lo recomiendo, es
muy divertido.
Pero
no todo es divertirse, la familia tiene sus obligaciones. Uno de los momentos
tensos llega cada mañana cuando hay que prepararse para ir al cole. “¡venga
arriba!, ¡desayunad!, ¡vestíos!” ¿Cuántas veces hemos repetido mi mujer y yo estas palabras antes de salir por la puerta?
Creo que trillones. ¿Alguien tiene la fórmula mágica que nos ayude mejorar
estos instantes? Yo no, aunque a veces utilizo otro truco: les digo “¿Queréis
ir en bici al cole?” ¡En nuestro caso funciona! No es perfecto, aunque nos va
bien.
Otro de los beneficios de ir en bici al cole, aparte de que no contamine y sea saludable, es que siempre encuentras sitio para aparcar .Excepto los viernes a primera hora, que se pone el parking “hasta la bola”. Aquí no hay truco. Tienes que madrugar un poco más que los demás.
Seguro que vosotros y vosotras, mayores y peques, tenéis muchos más trucos para mejorar el día a día. Para nuestra familia uno de los buenos es pedalear juntos, nos divierte e incluso ¡vivimos momentos mágicos!
Por
eso y muchas cosas más, recomiendo practicar la Fórmula de la Conservación de
la Felicidad: Felicidad = Familia x
Bicicleta2. En la que observamos que Felicidad y Familia son
las variables, y Bicicleta la
constante. ¡Qué lo disfrutéis!
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